Chickens

Partido contra uno de los equipos llamados a luchar por los puestos de play-off. El año anterior ya nos había dado problemas, principalmente con su acierto desde el triple. En este año, además, se habían reforzado por dentro, sumando altura y kilos, por lo que el partido estaba llamado a ser reñido, como ya sucedió en un amistoso de pretemporada.

En los primeros minutos, Skull salió más metido en el partido, atacando bien y dominando el rebote. El jugador número 23 imponía su ley, en ambos aros, mientras que nosotros no acabábamos de ubicarnos.

Poco a poco fuimos entrando en el partido. Ajustamos la defensa, cerramos mejor el rebote y a partir de ahí comenzó a fluir nuestro juego. La reacción fue suficientemente rápida para irnos ganando ya en el primer cuarto. 

El segundo cuarto fue el que prácticamente decidió el partido. Si bien nuestro ataque no fue muy fluído, si que apretamos en defensa, dejando a Skull con tan solo 3 puntos en 10 minutos.

Con el tercer cuarto llegaba el cambio de canasta. Una jugada que claramente estaba planeada inteligentemente por nuestro rival. Si la canasta de los primeros cuartos tragaba cualquier tipo de tiro, la que nos tocaba para esta recta final del partido era dura y escupía cualquier balón. Mantuvimos la concentración  y conseguimos ganar también los dos últimos cuartos. Cada intento de reacción se contestaba con una canasta justo a continuación, minando la moral de Skull.

Skull estuvo bien, pero este fue posiblemente el partido en el que mejor hemos mantenido la concentración y la intensidad defensiva. Salvo al comienzo del partido, fuimos un bloque a ritmo constante, sin bajar en ninguna faceta del juego.